24 de abril de 2025 - Tiempo de lectura 3 min
Ciberseguridad: protege los datos de tus clientes y evita sanciones
La ciberseguridad y la protección de datos son dos pilares fundamentales sobre los que debe sustentarse la estrategia de cualquier tipo de empresa. Sin embargo, los autónomos suelen dejar este aspecto en un segundo plano, lo que no solo pone en riesgo su negocio, sino que también puede conllevar sanciones por incumplimiento de las distintas normativas legales.
Es fundamental que tanto pymes como autónomos comprendan que la protección de datos no es solo una recomendación, es una obligación legal. Cualquier entidad que gestione información personal de clientes, proveedores o empleados está obligada a cumplir con la normativa, independientemente de su tamaño o sector de actividad.
Y es que, las sanciones por incumplimiento de la legislación en materia de protección de datos pueden tener consecuencias muy negativas. En los casos más graves, las sanciones pueden alcanzar los 20 millones de euros o el 4% de la facturación anual. Incluso aquellas infracciones menores pueden derivar en sanciones importantes que afecten al negocio de cualquier pyme o autónomo.
Soluciones para la protección de datos
Para evitar sanciones y desarrollar una estrategia efectiva de protección de datos, es necesario implementar una serie de medidas de ciberseguridad. El primer paso es identificar las vulnerabilidades en el equipamiento, los dispositivos y las aplicaciones con las que se trabaja. Una vez realizado este análisis, se deben poner en marcha acciones como las siguientes:
- Diversificar el almacenamiento: es común que los trabajadores de una pyme o los autónomos utilicen distintos dispositivos para acceder a la información, incluyendo ordenadores, smartphones o tablets. Esta variedad aumenta los puntos de acceso y, con ello, el - riesgo de tener brechas de seguridad. Se recomienda implementar un sistema de seguridad por capas y utilizar servicios de almacenamiento en la nube (Dropbox, Google Drive, etc.). Asimismo, es conveniente contar con dispositivos de almacenamiento externo, aislados de la red, para almacenar la información sensible.
- Cifrar datos: se trata de un punto muy importante y que, de forma recurrente, no se suele cumplir. Los datos sensibles almacenados en ordenadores, smartphones o dispositivos externos deben estar siempre cifrados para evitar accesos no autorizados en caso de pérdida o robo.
- Uso de contraseñas robustas: otro apartado fundamental es el empleo de contraseñas robustas. Las contraseñas deben ser fuertes y únicas, y cambiarse de forma periódica. De esta forma se evita que los ciberdelincuentes accedan a información sensible que pueda comprometer el negocio.
- Fomentar la cultura de la ciberseguridad: para los autónomos es conveniente conocer los métodos de ataque más habituales, como el phishing. Saber identificar correos fraudulentos o no abrir enlaces sospechosos puede evitar un ciberataque y, con él, la pérdida de datos.
- Informar sobre los incidentes: El Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) obliga a las empresas y autónomos a informar sobre brechas de seguridad dentro de las 72 horas posteriores a su detección. La notificación de una brecha que afecta a datos personales demuestra responsabilidad y puede evitar la sanción. Sin embargo, no notificar el incidente, puede conllevar multas de hasta 50.000 euros.
No sólo para evitar sanciones
También tiene un impacto directo en la reputación del negocio. Sufrir un incidente de ciberseguridad con sustracción de datos impactará de forma significativa en la reputación de un autónomo. Si el autónomo o la pyme no presta atención a este apartado va a suponer una pérdida de confianza por parte de los clientes lo que dañará la imagen del profesional y supondrá la pérdida de ingresos.
Hoy en día, los clientes, usuarios y proveedores son cada vez más conscientes del valor que tienen sus datos. Por este motivo, demostrar un compromiso real con la protección de la información puede ser una ventaja competitiva que ayude a ganar la confianza de nuevos clientes.
Por otro lado, un incidente no sólo expondrá al profesional a sanciones, sino que le hará incurrir en gastos derivados de la eliminación del malware, la recuperación de los datos y el tiempo de inactividad hasta que todo vuelva a funcionar con normalidad.
Un servicio adaptado para la protección de datos
La mayoría de los autónomos no presta suficiente atención a la protección de datos por falta de tiempo o por considerar que la ciberseguridad supone un coste elevado que no se pueden permitir. Para solucionar ambos problemas, Vodafone ofrece a pymes y autónomos el servicio Seguridad Digital, un conjunto de herramientas de prevención, protección y respuesta ante incidentes que proporciona un completo sistema de ciberseguridad.