16 de abril de 2025 - Tiempo de lectura 2 min
Cómo adoptar la factura electrónica beneficiándose del Kit Digital
Aunque la fecha inicial era el próximo 1 de Julio, la obligatoriedad de emitir factura electrónica se ha retrasado hasta 2026. A partir de entonces, todas las empresas deberán emitir sus facturas en formato electrónico, independientemente de su tamaño o volumen de operaciones. Esta medida, impulsada por la Ley Crea y Crece (Ley 18/2022), busca combatir el fraude fiscal, mejorar la transparencia y reducir la morosidad en las relaciones comerciales.
Este cambio va a suponer una transformación radical en los departamentos de contabilidad y afectará especialmente a las empresas más pequeñas, ya que requiere el uso de sistemas y aplicaciones que cumplan con estándares específicos.
Para facilitar la transición, la Agencia Tributaria tendrá lista a partir de verano una aplicación que permitirá a autónomos y pequeñas empresas emitir facturas electrónicas adaptadas al nuevo reglamento sin necesidad de pagar ningún software. Sin embargo, esta solución sólo será válida para quienes emitan hasta 100 facturas al año. Para el resto, será necesario contar con una solución específica que cumpla con la normativa.
En este caso, para cumplir con la legislación, los autónomos y micropymes deberán utilizar un programa de facturación compatible con la plataforma en línea Verifactu, un sistema impulsado por la Agencia Tributaria que garantiza la trazabilidad de las facturas y evita la alteración de los datos generados
Qué es una factura electrónica
Una factura electrónica es aquella que se expide y recibe en formato electrónico y en la que se documenta operaciones comerciales entre empresas o profesionales. Para que sea considerada válida, debe cumplir con un contenido mínimo y características técnicas concretas.
Por norma general, existen dos tipos principales: aquella con formato estructurado y con formato no estructurado. Ambas son documentos digitales susceptibles de ser transmitidos mediante redes de comunicaciones electrónicas, como Internet (y que es el requisito imprescindible para considerarla como factura electrónica). La diferencia estriba en que el formato estructurado facilita su tratamiento automatizado mientras que el no estructurado no lo facilita. Un ejemplo de factura electrónica estructurada son las que utilizan el lenguaje XML y uno de no estructurada es una factura en PDF.
Entre las principales ventajas de la factura electrónica destacan la reducción de los errores humanos, la agilización de la tramitación y cobro, el acceso rápido a documentos, el ahorro de espacio de almacenamiento y la mejora del servicio al cliente. Además, si la contabilidad de una empresa está automatizada, este tipo de facturas permiten tener una mejor gestión contable.
Vodafone, partner para implantar la factura electrónica
Como agente digitalizador del Kit Digital, Vodafone ofrece servicios específicos para ayudar a las empresas a cumplir con la obligatoriedad.
Incluido en la oferta de Kit Digital, Vodafone ofrece a sus clientes un servicio integral que permite gestionar facturas desde cualquier dispositivo mediante una plataforma accesible y fácil de usar. Este servicio incluye, entre otras funcionalidades, la creación de facturas y presupuestos personalizados; el envío y cobro de facturas de forma online; el control de gastos e ingresos en un entorno cloud y el acceso ilimitado a facturas históricas. Todo ello cumpliendo con los requisitos de integridad, conservación, trazabilidad e inalterabilidad de los registros que se exige a la factura electrónica.