La ciberseguridad ya no es solo una cuestión tecnológica, es una responsabilidad que debe ser compartida por todos los miembros de cualquier empresa.
Los ciberataques evolucionan a un ritmo vertiginoso y los empleados se han convertido en uno de los vectores de ataque más utilizados por los ciberdelincuentes. Según el informe
“Voice of the CISO 2024” de Proofpoint, más del 90% de los ciberataques comienzan con un simple mensaje de correo electrónico y muchos de ellos logran su objetivo gracias a errores humanos, como descargar archivos infectados. Además, cerca del 74% de las filtraciones están relacionadas con acciones involuntarias del personal. Por ello, la concienciación en ciberseguridad se ha convertido en el pilar fundamental para proteger cualquier empresa dentro de su propio entorno.